La antigua oficina de correos de Gustav Cornelis Bremer en la calle Coolsingel de Rotterdam celebrará su centenario el año que viene (foto 2). Salvo 23 agujeros de bala y la explosión de una bomba en el lado del Meent, el edificio sobrevivió relativamente indemne a la Segunda Guerra Mundial, pero por desgracia lleva más de una década vacío. Durante años, no parecía haber movimiento alguno en la remodelación del monumento nacional, pero en abril de este año, el primer pilote de inyección de lechada Tubex fue finalmente perforado a 65 m de profundidad en el suelo. ¿El resultado final previsto? Una torre de 154 m de altura en el antiguo patio y un monumento restaurado y transformado en un hotel de lujo de 5 estrellas.